Convertirse en padre es un asunto importante, hay muchos temas para pensar.
La mejor edad para formar una familia es aquella en la que nos sintamos ilusionados y deseemos de verdad tener un hijo, la decisión es personal y solo tú sabes cuando estás preparado, cada situación es diferente.
Es importante tener en cuenta que la mujer nace con un número de óvulos establecido y se conoce como reserva ovárica o folicular. Esta reserva no es otra cosa que la cantidad de óvulos disponibles en los ovarios para ser fertilizados por el espermatozoide, y este no aumenta con la edad, al contrario, este número va disminuyendo a lo largo de su vida reproductiva y sincronizar el reloj biológico con el momento en que te gustaría tener hijos sería lo ideal.
Desde que empiezan a formarse los óvulos en el feto, hasta que la niña alcanza la edad reproductiva, la cantidad de folículos primordiales disminuye drásticamente hasta que queda constituida la reserva ovárica.
En cada ciclo menstrual se pierden aproximadamente 1.000 folículos de la reserva ovárica de la mujer, como consecuencia de un sutil proceso de deterioro ovárico biológicamente controlado. Es por ello por lo que la edad es un factor determinante para el logro del embarazo.
Cuando una mujer comienza el proceso de búsqueda de un embarazo, desconoce el estado de sus ovarios y su reserva ovárica, pues ésta no tiene por qué ser igual en mujeres de la misma edad. Hay mujeres jóvenes con reserva ovárica disminuida en comparación con otras de más edad.
Por tal razón, se hace necesario averiguar cómo está la reserva ovárica en el momento en que la mujer desea quedar embarazada, ya que nos da información de las posibilidades de conseguir un embarazo de manera natural o si necesitará ayuda de la Reproducción Asistida (RA)
Los óvulos también se agotan de manera fisiológica, por procesos patológicos como la endometriosis, enfermedades autoinmunes y otros trastornos; Igualmente, si ha habido cirugías que involucren al ovario, o por estilos de vida poco saludables con hábitos como fumar.
La mejor forma de cuidarse y cuidar los óvulos es llevar una vida saludable, para ello se recomienda seguir un plan de alimentación equilibrado, incorporar el ejercicio físico en el día a día, evitar el consumo de alcohol y otros malos hábitos, así como acudir periódicamente a revisiones ginecológicas.
Con el análisis de ciertas hormonas sexuales en sangre, resulta fácil dar respuesta a estas mujeres y comprobar su estado reproductivo. Además, este análisis también sirve para que los especialistas en reproducción asistida decidan cuál es el tratamiento más adecuado para cada mujer.
Existen otras opciones en caso de querer retrasar la maternidad y es preservar la fertilidad con la “congelación de óvulos”, o “criopreservación de ovocitos”. Que consiste en extraer los óvulos maduros de los ovarios y congelarlos sin fecundar, así se conservan para su uso a futuro.
La congelación de óvulos podría ser una opción cuando:
- Tienes una enfermedad que puede llegar a afectar tu fertilidad: cáncer, lupus, anemia de células falciformes, predisposición genética a falla ovárica temprana, etc.
- Necesitas someterte a un procedimiento o cirugía que puede llegar a afectar tu capacidad de quedar en embarazo: deseo de cambio de sexo, (transgénero).
- Estás en una Fertilización Invitro y no quieres congelar embriones solo óvulos.
- Deseas preservar óvulos hoy para usar en un futuro, si no estás preparada para quedar embarazada ahora, pero planeas tener la posibilidad de un embarazo más adelante.
Recuerda siempre: un embarazo saludable empieza antes de la concepción. ¡¡Siempre, consulta con tu médico!! Te esperamos en CEFERTIL somos tu aliado.